La lección aquí es que la Seguridad en Dios puede ser una fuente de encono en nuestras vidas, especialmente cuando enfrentamos a los que más queremos.

Que nuestro Señor Dios y Dios, nuestro Padre, que nos amó y nos dio gratuitamente un consuelo imperecedero y una atinado esperanza, los reconforte y fortalezca en toda obra y en toda palabra buena.

La vida en este mundo es temporal y lo más importante es nuestra relación con Dios. Jesús nos recuerda que debemos tener miedo a aquel que tiene el poder sobre el alma y el cuerpo, en lugar de temer a los seres humanos.

Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo.

Jesús nos recuerda que no debemos temer al ser humano que puede matar solo el cuerpo, sino temer a aquel que tiene el poder sobre nuestra alma y nuestro cuerpo.

Por lo tanto, al reflexionar sobre la relevancia del sufrimiento de Cristo en nuestra fe cristiana, podemos tener en cuenta lo sucesivo:

Una de las lecciones más difíciles que nos da Jesús en Mateo 10:21 es la posibilidad de traición y odio incluso en nuestras propias familias.

Entonces, ¿cómo haremos eso? Observa el cronograma de la clase en el reverso de tu folleto. Las semanas 1 al 4 establecen un ámbito bíblico para el sufrimiento. En las siguientes semanas, aplicaremos ese entorno. Y por último, como puedes ver en el título de la clase 10, nuestro objetivo es individualidad ambicioso: El sufrimiento como evidencia. No es una simple clase de supervivencia, sino una clase para prepararnos para usar el sufrimiento para traer gozosamente honor y cielo a nuestro Rey de una guisa que sea dramáticamente atractiva a los que nos rodean. Como dice Pedro al escribir a la iglesia que padecía en 1 Pedro 2:12: «manteniendo buena vuestra modo de estar entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación».

4. El sufrimiento de Cristo nos invita a cargar nuestra cruz: Jesús nos animó a tomar nuestra cruz y seguirlo. Esto implica aceptar las dificultades de la vida con humildad y confianza en Dios, sabiendo que Él está con nosotros en todo momento.

Ser astuto no significa ser manipulador o deshonesto; sino tener sentido global y enterarse cómo guarecerse física y espiritualmente en un mundo hostil.

Jesús es el primero en hacerse siervo y en entrar en la escuela del sufrimiento. Asume la condición de siervo y se hace obediente hasta la muerte.

Tercero, su asesinato y resurrección nos ofrecen la esperanza de la vida eterna y la triunfo sobre el pecado y la homicidio. en pocas palabras, el sufrimiento de Jesús nos beneficia espiritualmente al revelarnos el simpatía de Dios, acorazar nuestra Convicción y ofrecernos la esperanza de la vida eterna.

Ahora bien, la Confianza es la señal de los fondos que se esperan, la plena certeza de las realidades que no se ven.

En todo caso, el sufrimiento hay que evitarlo, pero cuando no es posible Textos bíblicos para la fortaleza entonces lo podemos ofrecer uniéndolo a los padecimientos de Cristo.